Libros de la corte: nuevo número verano 2013

Definitivamente, no hay manera de cerrar el chiringuito esta temporada, ya que la actualidad no descansa, ni siquiera en el mundillo histórico.

Y como Roberto se refugia ya en sus cuarteles de verano, me toca estar de guardia, a la espera de poder trasladarme a una zona climatológicamente compatible con la vida humana. Mientras llega el relevo, les informo de la salida de un nuevo número de la revista Libros de la corte, donde se publican dos breves artículos de Roberto.

Llegada del ansiado relevo, (de "Obélix y compañía")

Uno de ellos es la reseña del libro “Alhajas para soberanos. Los animales reales en el siglo XVIII: de las leoneras a las mascotas de cámara”, de Carlos Gómez-Centurión Jiménez, y publicado por la Junta de Castilla y León.

El libro es una exhaustiva investigación sobre la variedad de animales que  poblaron los  Reales Sitios y el Palacio Real. La posesión de fieras exóticas contribuía a exaltar el poder real, y traerlos hasta la corte desde las procedencias más remotas del imperio exigía un enorme esfuerzo económico: leones, tigres, osos, águilas, avestruces, cisnes, peces exóticos, faisanes camellos, elefantes, pájaros cantores, loros, monos y, por supuesto, perros fueron poseídos por la corona. Pueden ver la misma en Libros de la Corte y Universia.

El otro es también una reseña, en este caso de “El Estudio General de Palencia. Historia de los ocho siglos de la Universidad Española”, de la Universidad de Valladolid y coordinado por Margarita Torremocha Hernández. Once artículos elaborados por 14 autores recorren la historia de las instituciones académicas españolas hasta la actualidad, divididos en bloques cronológicos. En la propia Libros de la Corte, y en Universia, de nuevo, pueden encontrar el mismo.

Y tras esto, ansiando el poder trasladarme más allá del Muro, me despido de nuevo (salvo que, de nuevo, la actualidad demande algún comentario por nuestra parte). Aunque no lo parezca, en el horizonte... winter is coming!

La cordillera cantábrica desde Santa Catalina... ¡el Muro!. Imagen de la madriguera del escobrice.